“Al empresario hay que ponerle una alfombra roja, es el motor de la economía”

Supo lo que era ser vicepresidenta del Govern autonómico siendo todavía muy joven, en 1993, entonces con Gabriel Cañellas como jefe del Gabinete. Licenciada en Derecho por la Universitat de les Illes Balears, Rosa Estaràs Ferragut vive su primera experiencia política como teniente de alcalde de Urbanisme i Cultura en su localidad de origen, Valldemossa, así como al frente de la Direcció General de Relacions Institucionals, entre 1991 y 1993, y de la Comissió Interdepartamental de la Dona. Entre los años 1995 y 2000 forma parte del Parlament y del Consell de Mallorca, responsabilidades que deja para ser elegida diputada al Congreso en Madrid, donde es nombrada portavoz adjunta del Grupo Popular. Actualmente forma parte de los comités ejecutivos regional y nacional de su formación política. En 2003, con el regreso del Partido Popular al Govern del archipiélago, Rosa Estaràs se convierte de nuevo en “número dos” del Ejecutivo, ahora con Jaume Matas y desempeñando de manera simultánea la cartera de Relacions Institucionals.

De una manera sintética, ¿cuál considera que es la situación actual de Baleares, en lo económico, lo político y lo social?
-En lo económico, lo más importante en esta legislatura es culminar las infraestructuras y la creación de puestos de trabajo. Es decir, carreteras, metro, depuración, escuelas, residencias, centros de salud y de carácter social, y crear trabajo. Y la creación de puestos de trabajo va ligada a nuestras fuentes de riqueza y, evidentemente, al turismo. Estamos en una tendencia ascendente en puestos de trabajo. En lo político, ésta es una legislatura con mucha estabilidad, con lealtad entre quienes hemos decidido firmar un pacto (en el caso del Consell de Mallorca) y de muy poca crispación. Las relaciones con la oposición gozan de buena salud. El aspecto social está ligado siempre a la participación ciudadana. Me he reunido con más de 350 asociaciones para explicarles la reforma del Estatut; la sociedad balear está muy vertebrada, muy bien organizada y es una sociedad muy madura en términos políticos.
-La perspectiva de la crisis turística parece haberse evaporado, al principio de este verano.
-Cuatro años atrás teníamos por primera vez un Producto Interior Bruto negativo, habíamos bajado de nuestro primer puesto turístico al tercero o cuarto y había una sensación de que al empresariado turístico se le había demonizado y de que el turista no era bienvenido. Eso lo hemos cambiado de arriba a abajo, recuperamos nuestro liderazgo, el turismo vuelve a ser bienvenido y el empresariado turístico goza de todo nuestro respeto y admiración, conjuntamente con el trabajador, no podemos hablar del uno sin el otro. Nuestro primer objetivo es recuperar a casi 700.000 turistas que habían dejado de visitarnos, hemos recuperado a casi 500.000. La meta principal es un turismo de calidad y la desestacionalización.
-Siendo los aeropuertos un aspecto fundamental del turismo, su cogestión con las Administraciones locales parece que despierta mucho interés.
-Nosotros, cuando gobernaba Aznar, ya presentamos en el Parlament una proposición no de ley para que fueran cogestionados por el Estado, la Administración local y la propiedad privada, porque puede dar más efectividad a los aeropuertos. Desde el principio pensamos que es el modelo a seguir. Es una decisión del Estado.
-¿En qué proporción participarían en la gestión las distintas instituciones?
-Es un tema menor. Lo que tenemos que ver es si el Estado está interesado en esta cuestión, a partir de ahí acercaremos posturas. No hemos entrado en esos aspectos. Lógicamente, cuanta mayor proporción le corresponda a la Comunitat Autònoma, más satisfactorio será para nosotros.
-Los vuelos entre Islas constituyen otra cuestión que parece que todavía no está del todo resuelta.
-La declaración de interés público lo primero que hay que conseguir es que se cumpla íntegramente: que se cumplan las frecuencias y que los precios sólo se puedan subir por causas excepcionales. Durante este año se ha incumplido la declaración en las frecuencias y también en los precios, se han producido tres subidas.
-En materia de infraestructuras, la otra gran cuestión serían, seguramente, las carreteras.
-Pero también el medio ambiente, como la depuración, y las dotaciones educativas y sociales. Tenemos más de sesenta inversiones en centros escolares. En cuanto a las carreteras, en la pasada legislatura nadie quería hablar de ellas y ahora todo el mundo quiere hablar de carreteras y hacerlas. Hemos conseguido que se hable de carreteras sin miedo. Hablamos de carreteras que sean sostenibles, todas cuentan con su informe favorable de impacto ambiental. Es una actuación importante. Yo llevo años en la Administración autonómica, desde el 91, y es la primera vez que un Govern apuesta de manera tan destacada, porque no inauguraremos una, inauguraremos dieciséis. La gente podrá comparar entre antes y después.
-Es evidente que en todo este tipo de cuestiones el papel del Gobierno Central resulta decisivo. ¿Resulta inevitable que las relaciones entre Baleares y Madrid sean difíciles si gobiernan partidos distintos, que es lo habitual?
-No debería ser así. Y de hecho hay ministerios con los que la relación es buena y otros con los que no es tan buena. Las relaciones son buenas si hay lealtad y se defienden los intereses de Baleares, y no son tan buenas cuando no se defiende a los ciudadanos de Baleares como a los de otras comunidades, como Cataluña. Pretendemos el mismo trato que los ciudadanos de Cataluña, gobernados por el PSOE:
-¿Con qué ministerios existe buena relación, y con cuáles no tanta?
-Con el señor Montilla la relación es positiva, tenemos un buen grado de sintonía. A día de hoy, parece que puede ir bien con Asuntos Sociales. Con Medio Ambiente tenemos un punto de discrepancia en las desaladoras, pero la relación es adecuada en otras cuestiones. Nuestra voluntad de diálogo es total. Tenemos muchos temas pendientes con el Ministerio de Fomento: la pelota está en su tejado y a ver si hay capacidad de diálogo.
-Mirando hacia dentro en vez de hacia fuera, ¿cómo se encuentran las relaciones del Govern con los Consells Insulars? ¿Existe la coordinación adecuada para evitar duplicidades?
-Las competencias están delimitadas y hay una colaboración muy leal con los tres Consells Insulars. En el caso de Menorca intentamos hacer un esfuerzo añadido, dado que tiene un color político diferente.
-La reforma del Estatut, a la que usted ha aludido, constituye una de las grandes cuestiones de esta legislatura, pero no parece que sea un debate que se viva en la calle.
-La reforma del Estatut creo que no estaba en el debate social. Los políticos sí la teníamos en cartera, pero la ciudadanía no. Desde el momento en que se abre el debate, tenemos que estar en primera línea, no debe haber comunidades autónomas de primera y de segunda. Hay un comité de sabios, que es una cuestión de la que me siento muy orgullosa, porque creo que pueden trabajar con menos presión que los políticos. Y luego están las reuniones con la sociedad civil, serán unas cuatrocientas asociaciones.
-Una cuestión muy ligada a esa reforma es la financiación. En el caso de Baleares parece que debería incrementarse, al haber aumentado su población.
-El modelo de financiación de 2001 deja claro que, si una comunidad autónoma aumentase su población tres puntos por encima de la media española, tiene que variar su sistema de financiación. Nosotros estamos en esa situación y todo el arco parlamentario de Baleares está de acuerdo. El presidente Matas se lo ha comunicado a Solbes y a Zapatero y hemos entregado toda la documentación. Es absolutamente innegociable que este tema se aborde. A partir de ahí hablaremos del nuevo modelo de financiación. Pero es una condición imprescindible que nos arreglen esto. Lo contrario sería descabellado. Creo que es un 27% de las tarjetas sanitarias que no se cubren con la financiación sanitaria que tenemos. Alguien tendrá que solucionarlo.
-El Régimen Especial Balear (REB) también debía resolver las carencias de las Islas, pero ha quedado en un segundo plano.
-Puede que, después del Estatut, el REB sea nuestra ley más importante. ¿Cuál ha sido el problema? Que, por los vaivenes políticos, no se ha desarrollado plenamente. Estamos estudiando una reforma del Régimen que haga que las compensaciones por la insularidad no queden al albur de ningún político: crear un fondo, de los impuestos de los empresarios, que se destinaría de manera finalista a inversiones.
-En un marco algo más amplio, ¿cómo contemplan ustedes la situación de la Unión Europea, después de los reveses de su Constitución?
-La Unión Europea nos interesa de manera prioritaria, y vemos su futuro con preocupación. Porque es importantísimo que tengamos una Unión Europea fuerte.
-Baleares se ha integrado dentro de una Eurorregión, con otras comunidades de la antigua Corona de Aragón y del sur de Francia.
-Creemos que ha de tener efectos positivos en varias cuestiones: un futuro canal de televisión, la cultura, la lengua, y el intercambio económico.
-Ésta también habrá sido la legislatura del inicio de las emisiones de la televisión y la radio autonómicas.
-Ha sido una cuestión de gran valentía la puesta en marcha de un canal autonómico, cuando la ley es de hace veinte años y cuando prácticamente todas las comunidades autónomas han creado su televisión. Ayudará a nuestro sentimiento de pertenencia a un pueblo y a nuestra lengua. Ha sido una apuesta muy valiente, con centros territoriales en Menorca, Eivissa y Formentera y con desconexiones para las cuatro Islas. Es un proyecto de futuro. Hemos creado una televisión con menos presupuesto, con menos personal y con parte de la producción externa para empresas de las Islas, con lo que también dinamizamos el sector audiovisual. El coste de esta televisión por habitante es de los más bajos de España.
-¿Cómo está favoreciendo el Govern la competitividad de nuestras empresas? ¿Con la simplificación de los trámites, por ejemplo?
-La burocracia se tiene que ir recortando. Hemos conseguido que el empresario ya no esté demonizado. Al empresario hay que ponerle una alfombra roja, prque es quien crea puestos de trabajo y el gran motor de la economía.