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La patronal hotelera apela a mejorar las infraestructuras

Cañellas pide que se corrijan errores para no quedar obsoletos

El turismo balear necesita vitaminas y nuevos alicientes para “enganchar” a los clientes ante la fuerte competencia de los destinos. En su tradicional discurso de Navidad, el presidente de la patronal hotelera de Mallorca, Pedro Cañellas, hizo un análisis de la delicada situación turística que se prevé para el próximo año, con un mercado alemán, en débil pero previsible alza, y un mercado inglés que, de momento no responde, debido a la depreciación de la libra esterlina con respecto al euro.
“El 2004 -ha dicho Cañellas- viene cargado de incertidumbres. Incertidumbres nuevas o viejas que nos obligarán a adecuar nuestros mecanismos de gestión a las nuevas demandas de mercado. Se están consolidando nuevas formas de demanda, con características distintas a las anteriores, que deberemos afrontar con nuevas ideas, si queremos corregir la tendencia a la baja de los últimos ejercicios económicos”.
En cuanto a infraestructuras, Cañellas lanzó una seria advertencia: “Seamos realistas. A fuerza de frenar y retrasar inversiones, Mallorca se está quedando obsoleta. Si no queremos quedarnos fuera de mercado necesitamos mejorar nuestras infraestructuras y servicios. Mallorca necesita carreteras más dignas y seguras. Una Isla dedicada por entero al sector servicios necesita carreteras rápidas y seguras. Se digan autopistas o autovías. Necesitamos soluciones pragmáticas a los problemas reales que afectan al día a día económico y laboral de nuestra Isla”.
En este sentido, el presidente de los hoteleros apeló a la necesidad de equiparar la oferta de equipamientos deportivos, como los campos de golf, a la demanda existente. También se refirió a la necesidad de mejorar la depuración de aguas residuales, y la regeneración y limpieza de nuestras playas.
“En este camino -ha proseguido Cañellas- tenemos que mirar al futuro con coherencia, distinguiendo claramente entre lo que somos y lo que queremos ser como comunidad turística, si de verdad queremos seguir siendo competitivos también necesitaremos nuevas atracciones para el turismo familiar como los parques temáticos. Y si queremos captar turismo de congresos debemos convenir en que Palma necesita con urgencia un Palacio de Congresos excepcional que mejore nuestras limitaciones actuales en este segmento de mercado. Si el objetivo colectivo es salvar la economía, la única vía, a mi juicio, es competitivos y líderes”.
Con respecto a las vías de solución, Cañellas concluyó que “hoy más que nunca es necesaria la unión del sector para aprovechar al máximo nuestras ventajas, corregir los errores que todos sabemos que existen. Debemos plantar cara a las nuevas tendencias de mercado, ofreciendo un valor añadido más diáfano a un destino tradicional como el nuestro”.

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