La responsabilidad social corporativa se ve ya como una buena estrategia empresarial y como una contribución a la prosperidad de las compañías a largo plazo. Este es el mensaje que lanzó el presidente de la CAEB, Josep Oliver, durante su intervención en la jornada sobre la “Responsabilidad Corporativa como herramienta de competitividad empresarial”, que se celebró en la Cámara de Comercio bajo la organización de la Fundación para el Desarrollo Sostenible de Baleares, Adecco y el Club de la Excelencia en Sostenibilidad. Josep Oliver resaltó que la política medioambiental debe acometerse desde una acción integrada del Gobierno, el Ejecutivo balear, los Consells y los ayuntamientos, con la participación de todos los sectores empresariales. Asimismo, animó a los empresarios baleares a trabajar en esa línea y a concienciarse de la necesidad de velar por el medio ambiente, al tiempo que pidió a las Administraciones Públicas una mayor implicación.
En su opinión, el mundo empresarial tiene ante sí el reto de avanzar en la optimización del uso de los recursos, en el reciclado, en la reutilización de residuos y en la implantación de sistemas de gestión medioambientales.
Por otro lado, el conseller de Economía, Hacienda e Innovación, Lluís Ramis de Ayreflor, anunció durante la clausura que va a proponer la elaboración de un anuario de responsabilidad social corporativa de Baleares. En su intervención, el conseller hizo un llamamiento a las pequeñas y medianas empresas de Baleares a impregnarse de la filosofía de la protección del medio ambiente, ámbito en el que considera importante la implicación de las asociaciones empresariales, a fin de incidir en la concienciación, frente a la imposición.
A este respecto, invitó a las pymes a adaptar, no a copiar miméticamente, las acciones de responsabilidad social que han asumido las multinacionales en cuanto al medio ambiente.
También, el conseller de Medio Ambiente de Baleares, Jaume Font, quien inauguró las jornadas junto a Oliver, puso de relieve que, en la actualidad, las empresas tienen cada día más presente la necesidad de incorporar “las preocupaciones sociales, laborales, medioambientales y de derechos humanos como parte esencial de su estrategia de negocio”.
Font se mostró “firmemente” convencido de que los empresarios son conscientes de que el éxito comercial, el crecimiento estable y los beneficios duraderos “no sólo se logran con una maximización a cualquier precio de los beneficios a corto plazo, sino con un comportamiento sin duda orientado por el mercado, pero en todo caso responsable y basado en criterios de sostenibilidad”.