Actualitat CAEB. Portada

El Turismo de Golf en Balears. 2001

Se consolida como un segmento turístico de calidad y con un importante impacto desestacionalizador

Con el objetivo de posicionar Balears como un destino turístico de calidad se están realizando esfuerzos en potenciar segmentos turísticos de mayor valor añadido que el tradicional de sol y playa, con el objetivo de complementar y diversificar la actividad turística existente buscando además una especial incidencia en la reducción de la estacionalidad. Como se puede constatar en el estudio que se presenta, el turismo de golf constituye un segmento que presenta un componente estacional muy adecuado para reducir los desequilibrios en la distribución anual de los flujos turísticos, a lo que hay que añadir la alta capacidad de gasto que se supone a este tipo de turistas. A continuación se resumen las principales conclusiones y recomendaciones del informe sobre el turismo de golf en Balears realizado por la CAEB con la colaboración de la Conselleria de Turisme a través del IBATUR, y que supone una actualización del estudio realizado en 1997.

Conclusiones

La práctica del golf en el mundo sigue creciendo de manera continuada. Si en 1993 se estimaba en 47 millones el número de jugadores, en 2000 aumentó hasta 75 millones.
El desarrollo de nuevas infraestructuras de golf en Europa y en España ha ido parejo al crecimiento de la demanda. El caso español es uno de los más significativos, puesto que de los escasos 50 campos existentes en 1980 se ha pasado a 226 en 2000, aunque la gran aceleración se ha producido en la década de los 90.
El desarrollo de campos de golf responde a un doble aumento de la demanda. De una parte la demanda interna, dado que el número de federados españoles ha pasado de poco más de 5.000 en 1970 a 186.000 en 2001. De otra parte el aumento de la demanda originada por turistas, que en el ámbito español se ha estimado que ha pasado de 120.000 en 1985 a cerca de 580.000 en 2000
Balears también ha desarrollado considerablemente su oferta de campos de golf pasando de 8 campos en 1987 a 21 campos en 2001.
Aumenta la demanda en Balears. Este crecimiento se constata en el aumento del número de salidas (rounds) desde los cerca de 285.000 de 1995 a los 605.000 que se estiman en 2001. Como en períodos anteriores, la demanda de golf es principalmente turística con algo más de 455.000 rounds jugados por 'no residentes'. Sin embargo es significativo el aumento mostrado por los 'residentes', los cuales han pasado de representar 85.000 rounds anuales en 1997 a más de 150.000 en 2001.
El número de turistas de golf ha aumentado considerablemente. De la cifra de rounds jugados podemos deducir que el número de turistas de golf en 2001 alcanzó los 79.270, frente a los 46.806 de 1997. Estos turistas han generado en Balears 937.921 estancias las cuales pueden distribuirse entre las 781.601 estancias directas más otras 156.320 estancias generadas por acompañantes que no juegan a golf.
Tanto por la creciente ocupación de los campos de golf, cómo por las incertidumbres generadas en el entorno turístico internacional, las expectativas de crecimiento se han moderado, siendo el escenario más probable para los próximos años el de un crecimiento entre el 1 y el 5%.
Las modificaciones en el perfil de los turistas de golf han sido muy ligeras en los últimos años. Siguen siendo mayoritariamente alemanes, aunque la importancia del mercado británico ha aumentado notablemente. De edades comprendidas entre los 46 y los 60 años, aunque se observa una mayor incorporación de los segmentos más jóvenes. Las profesiones más habituales siguen siendo las de propietarios de empresa y altos ejecutivos, que practican el golf con relativa asiduidad, que realizan más de tres viajes de más de tres noches anualmente y que han realizado dos o más viajes en el últimos año para jugar a golf.
La mayoría de los turistas de golf sigue prefiriendo alojarse en hoteles o aparthoteles. Sin embargo se consolida el hecho de que un porcentaje importante de los turistas de golf se alojan en vivienda propia o alquilada o en casas de amigos y familiares y que en la actualidad ya se eleva hasta el 27,3% del total. En cualquier caso los que se alojan en hoteles o aparthoteles siguen escogiendo mayoritariamente establecimientos de categoría superior (4 o 5 estrellas) en más del 73% de los casos.
La estancia media se reduce ligeramente. De los 10,28 días en 1997 se ha pasado a los 9,86 días estimados en 2001. Paralelamente, los días de práctica de golf también se han reducido, pasando de los 7,07 de 1997 a los 5,74 de la actualidad.
La satisfacción de los turistas de golf continúa siendo elevada. En la mayor parte de aspectos analizadas se obtuvieron valoraciones, que aunque ligeramente inferiores a las obtenidas en 1997, continúan siendo muy elevadas. Destaca especialmente la mayor valoración asignada a la relación calidad/precio de la práctica del golf en Balears.
Los principales competidores de Balears en el turismo de golf son el resto de España (principalmente la Costa del Sol), Francia y Portugal (Algarve). Es de destacar la emergencia de Canarias como destino competidor, que en 1997 casi no aparecía como tal, mientras que en 2001 es señalado por un 16,2% de los turistas como el destino de golf más visitado.
Con relación a las principales motivaciones para escoger Balears, el clima, la facilidad de comunicación y las infraestructuras existentes son los motivos más mencionados. En general, el turista de golf valora más los aspectos de tranquilidad, naturaleza y culturales que el turista medio que visita las Balears. Es, asimismo, mucho menos sensible al precio.
Los turistas de golf son grandes conocedores de Balears, pues más del 50% han visitado Balears más de 4 veces, por lo cual ya disponían de información previa al viaje basada en experiencia personal y amigos y conocidos. La principal nota destacada con relación a 1997 es la constatación de la mayor importancia de internet como instrumento en la recogida de la información. Si en 1997 apenas un 0,3% de los golfistas declaraban haberla utilizado como fuente de información para el viaje, en 2001 casi un 17% declara su utilización.
El gasto total generado por los turistas que juegan a golf y sus acompañantes ha aumentado en términos nominales un 94,6% entre 1997 y 2001, situándose en 31.242,1 millones de Ptas. (187,77 millones de euros). El gasto medio total diario por turista ha experimentado un considerable aumento desde las 27.572 Ptas. de 1997 a las 33.310 de 2001, muy por encima de la media del conjunto de visitantes de las islas (12.244 Ptas. / 73,59 euros en 2000).
Los ingresos totales para Balears generados por el turismo de golf ascienden a 24.177,2 millones de Ptas. (145,31 millones de euros). Este importe se obtiene por la suma del gasto realizado directamente en Balears (15.542,3 millones de Ptas. / 93,41 millones de euros) por los turistas de golf y sus acompañantes, más la parte que gastaron en su país de origen y que revierte finalmente a Balears mediante pagos a agentes económicos de las islas (8.634,9 millones de Ptas. / 51,90 millones de euros).

Recomendaciones

Desarrollar políticas de aseguramiento de la calidad en el suministro de agua depurada. La viabilidad del negocio del golf en Balears, pasa por disponer de unos suministros de agua suficientes y de calidad, que permitan mantener las infraestructuras en óptimas condiciones. Si bien no existen quejas sobre la cantidad de agua disponible, en lo referente a la calidad, desde los campos de golf suele expresarse en determinados casos su preocupación, puesto que especialmente en verano, la calidad del agua depurada no se considera suficiente, con lo cual se perjudica a los campos.
Diversificar los mercados existentes, potenciando la presencia en Gran Bretaña y Escandinavia. En Balears se observa una presencia mayoritaria de turistas de golf alemanes, en consonancia con el éxito de este mercado en el conjunto del turismo que reciben las Balears. Sin embargo, las expectativas sobre el crecimiento de la economía alemana, y los buenos resultados de los mercados británico y escandinavo, pueden ayudarnos a determinar como prioritarios los esfuerzos promocionales en estos dos mercados, sin por ello obviar la tradicional importancia del mercado alemán.
Consolidar e incidir en la cultura de la calidad y de la atención al cliente. Los resultados obtenidos indican que la experiencia propia y la recomendación personal es la fuente de información principal de los turistas de golf. Procurar un alto grado de satisfacción es pues uno de los requisitos fundamentales para asegurar la fidelización de los mismos, así como para la difusión de Balears como destino ideal para la práctica del golf.
Continuar con los programas generales de desestacionalización. El mantenimiento del atractivo de Balears para el turista de golf, lleva implícita la necesidad de un mínimo de actividad en los destinos turísticos y una oferta complementaria abierta, especialmente en los meses de primavera y otoño. Los esfuerzos generales a favor de la desestacionalización turística, redundan por tanto, en la mejora del atractivo de Balears como destino de golf.
Redoblar los esfuerzos promocionales e Incidir en la creación de una imagen de Balears como "destino de golf". Los grandes esfuerzos promocionales y de producto que están llevando a cabo múltiples destinos, y de manera especial Andalucía, Algarve y Canarias, les está llevando a posicionarse como los líderes en el campo del turismo de golf. Existe el riesgo de que sin una atención adecuada, esto pueda perjudicar a medio plazo el desarrollo del turismo de golf en Balears, puesto que la imagen actual de Balears no está especialmente vinculada a este tipo de turismo. En este sentido se recomienda la difusión de las múltiples posibilidades de la práctica de golf en Balears y favorecer la continuación de las ofertas conjuntas realizadas por los diferentes campos de golf.
Favorecer el desarrollo de iniciativas promocionales conjuntas públicas y privadas. La mayor parte de campos de golf estima como oportuno aumentar la promoción exterior de los mismos y mejorar la coordinación entre ellos a la hora de llevar a cabo acciones promocionales. Asimismo reclaman una mayor implicación de los entes públicos en estos esfuerzos para mejorar la efectividad de los recursos invertidos.
Mejorar las comunicaciones, especialmente con Escandinavia en temporada baja. Las comunicaciones con Escandinavia son, especialmente en los meses de invierno y otoño bastante limitadas, lo cual dificulta el desarrollo de este mercado emergente.