Manuel Jiménez ha sido reelegido Presidente de la Agrupación Empresarial de Alquiler de Vehículos sin Conductor
"Muchas pequeñas empresas de rent a car tendrán que cerrar si no se fusionan o se agrupan"
Manuel Jiménez Delgado nació en Sevilla el año 1951, aunque desde niño ha residido en Mallorca. Como economista trabajó desde sus inicios profesionales en el sector del rent a car y hace ahora 22 años decidió instalar su propia empresa, Iber Auto. Conoce, por tanto, toda la evolución y el crecimiento espectacular que esta actividad ha registrado en las Balears durante las últimas décadas. Además, es un hombre muy involucrado en el mundo del asociacionismo como demuestra su reciente reelección como presidente de la Agrupación Empresarial de alquiler de vehículos sin conductor y su vinculación a la Asociación de Comerciantes e Industriales del Paseo Marítimo, que también ha presidido en los últimos diez años.
Usted entró en el negocio del rent a car hace treinta años. ¿Cual ha sido a grandes rasgos la evolución del sector?
Cuando yo empecé el negocio era relativamente pequeño, existían unas 150 empresas en lugar de las 360 actuales. Además, si antes una empresa con 10 vehículos podía ser rentable, en la actualidad una que tenga menos de 50 difícilmente lo podrá ser, independientemente de que sea familiar o no. Se ha pasado de una flota global de entre 4.000 y 5.000 vehículos a los 40.000 que hay en estos momentos en Baleares.
Realmente es una cifra muy importante.
Sí, de hecho es tremendamente excesiva, en mi opinión. Esta gran oferta es difícil que se corresponda con una gran demanda durante un largo periodo de tiempo, ya que con la estacionalidad que hay, la flota está alquilada al 100% no más de treinta días al año. Por tanto, durante el resto del año la oferta existente distorsiona totalmente los precios y hace que la rentabilidad del sector en los últimos años esté por los suelos.
¿En su empresa Ud. ha intentado escapar de la fuerte dependencia del sector turístico?.
Sí, mi empresa es de tamaño medio, con una flota aproximada de 200 vehículos, y en cierta manera es atípica, porque me dedico básicamente al mundo empresarial. Mi actividad se concentra en un 75% de servicio a empresas y el resto al turismo, y esto la diferencia de las otras empresas del sector. Este hecho repercute en mi vinculación al mundo empresarial desde hace años. Tengo un compromiso muy serio con la empresa balear para protegerla, consolidarla y mejorar su imagen. Todo junto hace que me centre más en la actividad industrial y comercial.
¿Puede ser que su formación como economista le haya ayudado a tener esta concepción más amplia?
Sí, yo tengo una visión bastante más avanzada de lo que es puramente el sector turístico y esto hace que no me concentre en el monocultivo turístico y tener un producto que se adapte perfectamente a las necesidades que sé que tiene el sector empresarial en las Balears. Al estar en contacto permanente, sé qué es lo que necesita. Estoy muy especializado en vehículos industriales y comerciales, como son todo tipo de furgonetas de carga, vehículos isotérmicos y camiones. Tengo la más amplia y variada gama de vehículos industriales de las islas.
Hay un negocio paralelo en el sector rent a car que es la exportación que a veces roza la ilegalidad.
Yo entiendo que la exportación es necesaria porque difícilmente los mercados balear y peninsular de segunda mano pueden absorber una cantidad tan importante de vehículos. Por tanto la exportación es beneficiosa. El problema es que se han montado empresas nuevas que basan su actividad de forma total en la exportación y esto inunda el sector con flotas que hacen los tres mil kilómetros o los tres meses que marca la ley a precios muy bajos para después ser exportados. Por lo tanto hay que diferenciar entre unas empresas y otras. Yo nunca he aprobado esta actividad y creo que deben hacer mucho daño al sector.
¿Y se ha hecho algo para erradicarlo?
Hay muchas actas levantadas tanto en Balears como en el resto de España, pero cuando la Justicia es tan lenta, al final ya no es justicia. En este sentido, hemos observado que han desaparecido en las Islas muchas pequeñas empresas que tenían unos veinte vehículos y que llevaban toda la vida en el sector.
¿Se ha frenado esta actividad en los últimos tiempos?
Sí, porque los precios en Europa cada vez se armonizan más y las marcas de vehículos, que también son responsables de este fenómeno ya que sabían a quien vendían los coches, al haberse animado el consumo interno, ya no tienen tanta necesidad de vender vehículos al sector del alquiler.
Cambiando de tema, ¿qué facturación mueve el sector del rent a car y qué proporción de empresas son todavía de capital balear?
La facturación no la sabría concretar. En lo que se refiere a la composición empresarial, de las 360 empresas existentes, unas 280 disponen de entre 10 vehículos, que es el mínimo que permite la ley, y de 50. Esta cifra muestra que se trata de un sector muy atomizado con una importante proporción de empresas que tienen un nivel de rentabilidad mínima. Después nos encontramos con unas 15 empresas con flotas entre 1000 y 2000 coches, y las multinacionales, que cada vez hacen una política más agresiva en lo que se refiere a incremento y captación de flotas.
En este marco, ¿cuáles son las opciones de futuro que tienen las pequeñas empresas?
Mi mensaje es que estas empresas o bien se fusionen, se agrupen o formen cooperativas o les auguro un cierre masivo, precisamente a aquellas pequeñas de capital balear. En este sentido, desde nuestra asociación montamos agrupaciones de interés económico para darles apoyo.
En este sentido, Ud. tuvo una buena visión a la hora de diversificar su empresa.
Desde el principio tuve claro que tenía que diversificarme y nunca he entrado masivamente en la actividad turística, no quiero estar atrapado por los touroperadores. Esto me ha permitido crecer constantemente, incluso en los peores años.
Actualmente, una parte muy importante de los vehículos ya deben ser contratados a través de las agencias mayoristas.
Este es el problema. Antes casi todos los clientes alquilaban los coches aquí, y sólo venían con el paquete de avión y hotel. Ahora un porcentaje cada vez mayor también viene con el coche contratado. Este hecho da un importante dominio al touroperador, que lógicamente trata con empresas que puedan hacer frente a un número elevado de reservas y las empresas pequeñas difícilmente pueden participar. Este ha sido el gran cambio que se ha producido. Ante esta situación, yo no he querido quedarme al margen de este mercado turístico y una vez que ya tengo controlado el ámbito de la empresa, he montado junto con cuatro empresarios una nueva empresa con presencia en todas las islas que nos dará más fuerza de cara a los touroperadores y a la comercialización que hacen las agencias de viajes. Esto mismo es lo que animo a que hagan los demás empresarios. En la asociación tienen disponible los servicios de asesoramiento necesarios.
Ud. parece un gran defensor del asociacionismo.
Yo no concibo un empresario que no esté asociado y participe, se informe, aporte ideas y siga las directrices que surjan en el debate que se desarrolla en el marco de la asociación.
También ha librado importantes batallas al frente de la asociación empresarial del Paseo Marítimo de Palma.
Esta es una asociación con una problemática añadida, ya que yo represento desde los intereses del Auditorium, pasando por los de los establecimientos hoteleros, discotecas, agencias de viajes, comercios, restauración, etc. Por lo tanto, hay unos intereses muy dispares que me obligan a negociar mucho y a buscar el consenso con tal de conseguir un cierto equilibrio para que se defiendan los intereses generales. En este sentido, como presidente me tocó luchar contra una medida injusta como la de tarifar el Paseo Marítimo las 24 horas de los 365 días del año con unos precios que habrían arruinado a muchas empresas. El problema del Paseo Marítimo es que muchos edificios no tienen aparcamientos, especialmente los hoteles, que en esta zona tienen un tipo de cliente que suele alquilar un coche. Además hay un número importante de discotecas.
¿Qué soluciones alternativas hay para solucionar este problema?
Como presidente de la zona, he buscado alternativas. Una que propuse al sector de la noche es que los vehículos se estacionasen en la estación marítima y con minibuses de la propia asociación acercaríamos a los clientes a los diferentes locales. También he intentado llegar a un acuerdo con el colectivo de taxistas con el propósito de ofrecer a los jóvenes el desplazamiento al Paseo Marítimo prácticamente gratuito. Pero son ideas que por egoísmo de algunos empresarios, que no creen en el asociacionismo, todavía no han prosperado. Lo que tampoco podemos hacer es convertir todo el Paseo Marítimo en un gran parking.
Otra de las reivindicaciones en la que Ud. está participando es la de construir un centro de congresos y convenciones en Palma.
Yo personalmente estoy convencido que Balears está perdiendo el negocio de los congresos. Sólo estamos realizando pequeños congresos y todos los importantes se hacen fuera. No tenemos la infraestructura necesaria. Y cuando se está hablando de romper la estacionalidad, es importante tener un centro de convenciones, sobre todo si tenemos en cuenta que Balears reúne unas condiciones muy buenas, tanto climáticas como de capacidad hotelera. En todo caso, el debate está en decidir quién lo paga y en este punto prefiero no entrar.
Para acabar me gustaría hablar de futuro. Una vez reelegido presidente de la Agrupación Empresarial de alquiler de vehículos sin conductor, ¿qué objetivos se marca?
En este mandato quiero que las empresas apuesten totalmente por la calidad y que tengan un distintivo, que promoveré junto con la Conselleria de Foment. Aprovechando que la flota es muy nueva, se ha de modernizar también el servicio para conseguir los mejores parámetros de calidad del país.